Entrevista a Phillip Chicola.
Realizada el 2 de noviembre, 2017.
Phillip Chicola es licenciado en Ciencias Políticas, egresado de la Universidad Francisco Marroquín, con un posgrado en Gerencia de Organizaciones Empresariales en INCAE Business School, Costa Rica. Actualmente es el director de la Unidad de Gestión Pública de CACIF.
1. ¿Como ha visualizado el cambio político del 2015 a la fecha?
Sostengo la hipótesis de que Guatemala está sufriendo un proceso de transición. Antes del 2015 vivíamos en un sistema en donde la corrupción era el motor de la acción política. Una analogía clarificando el tema: en países funcionales, tomando la imagen de un árbol, la corrupción es dos o tres manzanas podridas, mientras que en Guatemala la corrupción está en la raíz. En nuestro país, los partidos políticos han operado como vehículos de negocios o para el saqueo de instituciones; como agencias de empleo. Esto empieza a cambiar; se han evidenciado casos de financiamientos y enriquecimiento ilícito; contrataciones del Estado anómalas. Este proceso de cambio genera incertidumbre política, inestabilidad económica y rotación de élites. Estamos viviendo la fase golpeada del proceso, en teoría vamos a construir un Estado de derecho funcional pero todavía no estamos viendo la luz al final del túnel.
2. ¿Qué opina de la declaración de non grato del presidente Jimmy Morales a Iván Velásquez?
Es un gran error político por varias razones: primero hay que entender que esta transición esta empujada en parte por una agenda internacional que determinó
al Triángulo Norte (Guatemala, El Salvador y Honduras) como países disfuncionales con pobreza, inseguridad, crimen organizado y corrupción. Son los focos principales de migrantes a los Estados Unidos. La agenda norteamericana decide limpiar la corrupción en los países del Triángulo Norte para erradicar este problema. El brazo operativo para ese trabajo en Guatemala es la CICIG. Estados Unidos reacciona y amenaza con quitar visas, congelar los fondos y los préstamos. El segundo motivo, Morales está traicionando la razón que lo llevó a la presidencia, el electorado lo eligió porque estaba cansado de las prácticas corruptas de siempre. Está traicionando el voto ciudadano.
3. ¿Qué impacto a corto y mediano plazo tendrá en la economía guatemalteca la degradación de la deuda de Guatemala por Standard and Poors de BB a BB-?
A corto plazo envía un mensaje negativo a los agentes económicos. Las calificaciones de riesgo son como el CV de un país. De entrada, la imagen del país hacia el mundo sufre, porque el mensaje enviado es que Guatemala es un país con inestabilidad política. A mediano plazo, las calificaciones de riesgo miden el riesgo soberano que tiene un país para hacer frente a sus obligaciones financieras internacionales, a los préstamos y a los créditos internacionales. No le van a dar a Guatemala préstamos con tanta facilidad y si los dan será con interese más altos. El tercer efecto es que la misma dinámica la sufrirán las empresas, por muy sólidas que sean en el país.
4. ¿Qué cambios deberíamos exigir como ciudadanos a los partidos políticos?
Hay que hacer una restructuración del régimen de partidos, un primer cambio sería construir verdaderos partidos cohesionados en torno a una visión ideológica. Segundo, los partidos en Guatemala, como no son partidos en la buena definición, tienen dueño. La agrupación se crea para llevar a “esa” persona a la presidencia. En el buen sentido de la palabra un partido político es un club democrático en el que se entra y se va adquiriendo liderazgo, el partido debiera generar los mecanismos para que se creen candidatos. Por último, los partidos tienen que transparentar su financiamiento. Resolver ese problema, en ningún país del mundo se ha logrado al 100%, pero lo que las experiencias internacionales nos han mostrado es que cuando se transparenta la lista de los donantes es más fácil fiscalizar que no haya favores extraños.
5. ¿Cómo se podrían fiscalizar las campañas políticas para no caer en la corrupción que hasta ahora ha prevalecido?
Primero bancarizar el financiamiento, es decir, que todas las transacciones de los partidos políticos se ejecuten a través de cuentas bancarias centralizadas. Segundo, hay que dotar al Tribunal Supremo Electoral de la capacidad para rastrear el dinero. Hay que darle la facultad de poder ir a los bancos y pedir información de los movimientos financieros de los partidos, también que se les permita ir a fiscalizar en el terreno de los mítines políticos. Tercero con sanciones, a cualquier candidato que transgreda las normas de financiamiento y de transparencia se le debe impedir participar.
6. ¿Se podría construir una democracia funcional sobre las bases de los organismos actuales del Estado?
Una democracia funcional es que el Estado sirva para la razón por la cual fue constituido. Los artículos I y II de la constitución hablan de que el Estado de Guatemala se crea para defender la vida, la libertad, la justicia y promover el bien común. Un sistema político funcional es un sistema en donde el Estado tiene la capacidad de ofrecer servicios funcionales de seguridad; un sistema de justicia efectivo y servicios públicos que permitan resolver las necesidades de la población. El sistema no va a ser funcional hasta que se limpien las estructuras de corrupción, se fortalezca el sistema de justicia, se clarifiquen las reglas del financiamiento en la adquisición de bienes y servicios y la contratación de personal. Muchas de estas leyes están desactualizadas y son disfuncionales.
7. ¿Cómo la división que se está dando en el país puede afectar la realización de las próximas elecciones?
Más que tener un efecto en la realización de las próximas elecciones, tiene un efecto en la estabilidad de país a corto plazo porque las siguientes elecciones indistintamente de que bando gane en el debate, se van a dar. Para las siguientes elecciones se está generando un entorno como para pensar que un nuevo Jimmy Morales va a surgir, un candidato "outsider". Va a ser un escenario electoral bastante atípico.
8. ¿Establecerán las próximas elecciones el camino al cambio que necesita el país?
En teoría es lo que representaban las elecciones del 2015. Jimmy Morales representaba el candidato outsider que gana las elecciones debido al rechazo a los demás partidos. Se suponía que él iba a encausar una agenda de cambio político en el país para que no regresáramos a los males políticos del pasado. El problema es que en este año y medio no sean encauzado las reformas legales para cambiar lo que había antes y mientras más pasa el tiempo pareciera que vamos a llegar al 2019 con las mismas reglas del juego. No con los mismos actores, pero si con similares a los del viejo sistema. Pareciera que vamos a tener una repetición similar a la del 2015. El próximo gobierno va a ser una moneda al aire, si va a ser malo, si va a ser de transición o si vamos a ir por el buen camino solo hasta que ya estemos adentrados en él vamos a poder descubrirlo.
9. ¿Será crítica la elección del Fiscal general en mayo de 2018? ¿Por qué?
Es clave porque de esa elección va a depender si la agenda de lucha contra la corrupción se mantiene desde el Ministerio Público. Si llega un fiscal que no esté montado en el mismo barco contra la corrupción, él sí tiene la facultad para bloquear a la CICIG y allí la situación puede dar un giro de 180 grados. Con un fiscal en la línea de Thelma Aldana las cosas van a continuar tal y como están. Mi hipótesis es que van a presionar al presidente para que el nuevo fiscal sea alguien cercano a la CICIG, lo van a presionar sacándole nuevos casos. Creo que ese es el escenario que se pinta para el 2018. Dos grupos van a chocar por la lucha del poder. Esta dinámica de incertidumbre se mantendrá hasta después de la elección del mismo.
10. ¿Ve a la CICIG en el año 2020 en Guatemala?
Yo creo que sí. La gente desea que continúe la CICIG para seguir desenmarañando casos. Después del historial de estos dos años con todos los casos que se han destapado; Guatemala es el tercer país del mundo que pasó de tener un presidente a las 8 de la mañana y tenerlo preso a las 5 de la tarde, es una medalla para la CICIG. La comunidad internacional pedirá ahora en el 2017 y en 2019 que siga operando. Veo a la CICIG probablemente hasta el 2023, después posiblemente tendremos una fotografía más clara de la situación.
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